5/11/15

¿Son necesarias las reglas en la educación de una persona?

Texto de Cecilia (6ème B):



A veces pregunto a mi madre ¿por qué es importante la buena educación?, ¿por qué me obligas a hacer cosas que los demás no hacen?, si el resto no es educado, y no lo hace, ¿por qué tengo que hacerlo yo?

Siempre es muy clara y me responde lo mismo: "Cecilia, es muy sencillo... Vivimos en sociedad y nos relacionamos unos con otros, la buena educación es necesaria. Para viajar al extranjero necesitamos el pasaporte, para viajar por la vida nuestro pasaporte es la educación."

Es una tarea diaria, constante y muchas veces es oesada, de tanto repetirse. No entiende de moda ni de edad y cualquier momento es bueno para aprenderlo de los demás.

Tener una buena educación es saber convivir, agradar, estar en cualquier ocasión...por eso es tan importante.

Debemos respetar a los deás, escuchar, comprender, ser discretos, hacer que nos entiendan, en fin, tratar a todas educadamente, como nos gustaría que nos trataran a nosotros. 

De esta forma, si todos actuáramos así, entre todos sería mucho más fácil y agradable, y se evitarían muchos problemas, discusiones y malos entendidos.

Seamos educados.

¿Cuáles son las diferencias entre nuestra educación y la de nuestros abuelos?

Lee el texto de Inés y Margaret (6ème A)


Las diferencias entre la educación de nuestros abuelos y la nuestra son varias. Veamos algunas de ellas.

Hasta 1970, en España, todos los colegios tenían que separar los chicos de las chicas porque la educación era distinta para unos y otros.  Tanto es así que las mujeres tenían menos oportunidades para estudiar una carrera y en general estudiaban enfermería o magisterio mientras que los hombres estudiaban arquitectura o derecho. Aunque eso dependía mucho del país en que se estaba. Según tengo entendido, en Francia y Portugal había más oportunidades para las mujeres que en España.
  
El colegio era un lugar muy aburrido. Nuestros abuelos no tenían ni ordenadores ni calculadoras. La educación era más severa y existían los castigos físicos. Además ellos no tenían mucha mobilidad para viajar o hacer excursiones con el colegio y no aprendían tantos idiomas como nosotros. Vivían separados del resto del mundo aunque creo que nuestros abuelos se comunicaban más con su entorno. Antiguamente, los padres trabajaban menos y estaban más tiempo con sus hijos. Hoy en día, nuestras madres trabajan igual de tiempo que nuestros padres. De hecho, cada vez hay menos reuniones familares. 
Y esto es todo lo más importante de las diferencias entre la educación de antaño y la actual. ¡Cuánto ha evolucionado desde entonces!




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